Mucho
se
habla y poco se explica como es posible que aun tengamos sin
solucionar el problema de la vivienda, a pesar de la Ley Nacional Nº 24.464 sancionada el día de la mujer pero del año 1.995 (18 años).-
Lo interesante de aquella
¿vieja/nueva? Ley es que garantiza fondos para viviendas. Arrancó
con un piso garantizado de $75.000.000 mensuales (900.000.000
anuales) tratemos de ubicar la cifra en el año '95, fijando el 42%
de los Impuestos sobre los combustibles líquidos específicamente
para el FONAVI (Fondo Nacional de la Vivienda). No me animo a
calcular cuanto representa en pesos con los incrementos no solo del
valor del combustible sino de la mayor demanda por crecimiento del
parque automotor en general.-
A todo esto hay que sumarle
otros programas financiados por el tesoro nacional como lo explica
extensamente José Antonio Artusi en su publicación titulada "La discriminación de la provincia de Entre Ríos en los Programas Federales de Vivienda (2003-2010)".-
De
la
misma manera la legislación también tiene en cuenta como distribuir
esos fondos, y si a esto le agregamos que además de los censos
existen diversas formas de relevar y evaluar las necesidades, resulta
muy difícil explicar como no se cuenta con un cronograma claro y
cierto para dar soluciones al déficit de viviendas, y menos se
explica que las pocas concreciones deben estar sujetas a la "buena"
predisposición del funcionario de turno para los "planes"
que se gestionen.-
Tenemos
la
plata, tenemos la legislación, tenemos los organismos, tenemos los
censos... no podemos resignarnos a aplaudir de vez en cuando nos
tiran algún huesito.-
¿Cuál es la solución? Exigir que cada uno nos ocupemos de lo que nos corresponde y que lo hagamos bien, rindiendo cuentas con transparencia, donde las concreciones puedan respaldar los fondos destinados.-
Mercedes
